Vaya, aquí viene Piper con su retahíla sobre diversidad, igualdad y negros.
Pues no, mi negativo amigo. Hoy no hablaremos sobre personajes minoritarios, no abordaremos ningún aspecto del trauma, no resarciremos a los personajes negros, ni enseñaremos a matar sin matar. Ha llegado el momento de darle la cara al toro. Y para que quede claro, no estoy declarando mi afición por la tauromaquia, hablo de analizar los problemas que presentan los escritores blancos para describir personajes negros o escribir desde su punto de vista.
1. Soy blanco y lo que escriba puede resultar ofensivo
Según parece, esta es la principal razón por la que muchos escritores no se atreven ni a nombrar a un personaje negro en sus historias, pues existe un miedo latente a ser tildado de racista ¿Debo escribir o no sobre personajes negros? Se ha hablado tanto del tema que estoy confundido. ¿Y si Piper se enoja porque el personaje negro del Bronx llamado Lamar, que juega baloncesto y escucha rap, parece estereotipo?
Soy un chico blanco enojado con un bate, ¿qué tan peligroso puedo ser? ¡Piper! ¡Eso es prejuicio! |
Cuando coartas tu creatividad porque permites que este tipo de pensamientos se apoderen de ti, es como si dijeras que no puedes escribir desde el punto de vista de una mujer o un niño porque también se pueden ofender.
Siguiendo esta extraña lógica, llegaríamos a la conclusión de que los hombres blancos solo pueden escribir sobre hombres blancos, las mujeres sobre mujeres, los niños sobre niños, los zombis sobre zombis, los asesinos en serie sobre asesinos en serie, los elfos sobre elfos y los Lannister sobre Lannister… Cálmate, Piper. Respira. Pero es que… ¿Qué hay de divertido en ese tipo de escritura? Ninguna, no es nada proactiva.
Te pregunto, ¿qué hubiera ocurrido si George R. Martin no hubiera creado a Tyrion Lannister por miedo a que todas las personas con acondroplasia se pudieran ofender? El escritor no es precisamente de piernas y brazos cortos, ni mucho menos macrocéfalo, pero si se hubiera dejado llevar por este tipo de creencias o tabúes nos habría privado de ese magnífico personaje.
Vamos, atrévete. No tengas miedo. Nadie puede ni debe decirte sobre qué escribir. Crea personajes negros. Uno, diez, cientos o ninguno. Borra los estereotipos negativos, acepta la diversidad, respeta a tu prójimo y da forma a una verdadera persona. Si no lo intentas nunca conocerás tu verdadera percepción de la negritud.
Piensa una cosa: durante siglos los escritores negros hemos escrito sobre personajes blancos, ¿verdad?
2. Dicen que hay que escribir sobre lo que sabes y no sé mucho sobre la cultura de los negros
Bueno, este punto bien podría ser parte del primero, pero lo he dejado a un lado porque es una de las reglas más antiguas de la literatura. “Escribe solo sobre lo que sabes”. Me lo han dicho cientos de veces y creo que también he aconsejado de manera similar.
Aunque esta frase es una gran guía al momento de escribir, no creo que el autor de Guerra mundial Z fuera un zombi o tuviera contacto con uno; o el autor de American Psycho en la vida real sea un asesino en serie. Su conocimiento sobre estos temas en algún momento fue nulo, por lo que tuvieron que recurrir a la primera solución que voy a plantear: investigar.
Imagina que vas a describir una escena en la que tus personajes darán un paseo en globo de aire caliente. Hermoso. Gozarán del paisaje y tendrán una velada espectacular. Con seguridad no lo tomas a la ligera. Lees libros y manuales, visitas páginas confiables sobre viajes en globo, hablas con personas que han viajado o controlan globos, y, si es posible, pagas por un paseíto. Todo con el fin de no dejar ningún detalle que pueda echar a perder tu escena.
Sucede así con los personajes negros. Lee libros escritos por personajes negros, habla con ellos, investiga, con seriedad y deseo de aprender, sobre lo qué piensan. Esmérate por hacer las cosas bien.
No se trata de que tomes a las personas negras como tus conejillos de indias ni de que sean tu experimento. En verdad esmérate por acercarte y comprender aquellos aspectos que quizás desconocías o sobre los que estabas equivocado. Límpiate de prejuicios y hazte amigo. Si lo ves todo desde una ventana, como quien no quiere la cosa sino que lo hace por obligación, no lograrás nada.
Creo que había dicho que esta era la primera solución. La segunda manera de resolver tu problema de No sé de lo que escribo es, una vez que te has educado, ponerte en los zapatos de tus personajes. Imagina cómo serían ellos. Al fin y al cabo de eso se trata la ficción.
3. No veo en dónde entraría un personaje negro en mi historia
Sí, ya me lo has repetido miles de veces. Escribes fantasía alta y no hay cabida para personajes negros. Es como si intentarás encontrar un espacio para introducir a un personaje negro entre los principales de El Señor de los anillos. Simplemente no concuerda.
¡Llegó la sabrosura a la Tierra Media! ¡Azúcar! |
Esta excusa expresa una total falta de imaginación, más si hablamos de que escribes ciencia ficción o fantasía. Si creas orcos, dragones, magos, hombres del oeste, hombres del este, de extraña semejanza a vikingos, caminantes, demonios y hasta princesas guerreras, ¿qué estricta ley te impide introducir a un personaje de piel negra? Al fin y al cabo, si tu mundo no se asemeja al nuestro no habría porque hablar de racismo, esclavitud o temas espinosos. Recuerda, es worldbuilding.
Y si escribes No ficción pero no puedes ver en dónde encajaría un personaje negro, te recuerdo que ya hasta tuvimos un presidente negro. ¿Qué más necesitas?
Y si escribes No ficción pero no puedes ver en dónde encajaría un personaje negro, te recuerdo que ya hasta tuvimos un presidente negro. ¿Qué más necesitas?
Si a pesar de esto persistes en tu idea de que no puedes imaginarte al capitán de la flota intergaláctica como alguien negro, debo decir que tu imaginación necesita una renovación… urgente. Abre tu escritura a todas las posibilidades que este arte nos permite. Experimenta. Salte de ese sofá de comodidad en el que llevas sentado durante mucho tiempo.
4. Si mis personajes no son blancos no se interesarán las editoriales ni los lectores
Eso es pasado. Te cuento que, con todo y el problema de blanqueamiento de portada, la novela Mentirosa, de Justine Larbalestier, se vende como pan caliente. El diario completamente verídico de un indio a tiempo parcial, de Sherman Alexie, es un éxito, y ni qué decir de los libros de Butler. Estoy seguro de que, aunque el racismo de mercadeo existe, la calidad de un escritor puede superar cualquier obstáculo que se le atraviese. Algo es muy claro: si el libro es bueno las editoriales lo publicarán. Punto.
Aquí, cómoda, leyendo sobre princesas rubias y caballeros azules |
En cuanto a los lectores… creo que esa afirmación es una profecía autocumplida. No escribes sobre personajes negros porque tienes miedo de que los lectores no compren tus libros, pero si lo piensas bien, los lectores no pueden comprar algo que no se ha escrito aún. Al igual que con las editoriales, si el libro es bueno, los lectores se matarán por él.
5. Miles de excusas
Sé que pueden aparecer miles de razones por las cuales un escritor blanco, no racista, obviamente, siente que no puede incluir personajes negros en sus historias. Desde la excusa de que “no ve colores sino personajes” hasta “todas las razas fueron extintas por una plaga/epidemia/hechizo y solo los blancos sobrevivieron”. Sin importar cuál es la tuya, borra ya esa mentalidad, toma un lápiz y escribe. Si en definitiva no te sientes capaz, mejor no lo hagas y que tu reparto de integrantes del Klu klux klan se lleve todos los aplausos.
Y tú, si nunca lo has hecho… ¿Por qué no incluyes personajes negros en tus historias? ¿Conoces otras razones que haya omitido? Me gustaría saber qué piensas.
Sus artículos sobre este tema y sobre las minorías simbólicas son muy acertados. Y es una temática con la que hay que tener especial cuidado. Tengo una novela histórica por terminar en la cual la protagonista es una muchacha mestiza descendiente de esclavos. Y en otra parte de la misma historia incluyo toda un grupo de esclavos cimarrones que lograron escapar y formar una comunidad con sus costumbres y cultura. No me imaginé esto porque quiera poner personajes símbolos o algo por el estilo. Simplemente surgió como algo natural y con base en la historia real de lo que pasó en la mayoría de las colonias de América cuando se introdujo al esclavo africano. Pienso que incluir un personaje negro en nuestras historias debe depender del contexto. Y sobre todo, debemos construir un personaje lo más cercano a alguien real y no un estereotipo.
ResponderEliminarQué bueno que te gustó la entrada, Yasmila. En cuanto a lo que dices, escribir una novela histórica debe ser algo épico. Recolectar, estudiar y seleccionar la información adecuada no es fácil y te felicito por ello. No quiero inmiscuirme en tu novela porque, valga la redundancia, es tuya, pero debes tener cuidado con el concepto de la mujer mestiza (blanca), descendiente de esclavos.
EliminarQue la chica mestiza descendiente de esclavos se convierte en la libertadora de estos, resta mérito a la lucha que ellos enfrentaron por sus derechos y perpetúa la idea de dependencia de estos. Mi objetivo no es desilusionarte, solo darte ideas de hacia dónde debes dirigir tu creatividad. Además, es un cliché andante eso de la chica blanca hija de negros que los termina rescatando.
En fin, espero no te molestes por mi respuesta. Te felicito por atreverte a incluir personajes negros no simbólicos y eres bienvenida en Antro Narrativo, chao.
Muchas gracias por el consejo. Me alegra porque ya tuve esa misma reserva sobre la chica mestiza y sus contadicciones. Además con tantas novelas sobre mestizas y esclavas blancas como "La Esclava Isaura", "Cecilia Valdés", entre otras; pienso que termina siendo una especie de cliché. La verdad tengo muchas cosas que pulir en la trama de esa novela y en los personajes también. La buena noticia es que la idea que tengo está lejos de "la chica mestiza libertadora". Por ahora estoy concentrada en terminar otro proyecto que no quiero abandonar hasta que escriba el último capítulo. Después me concentraré en la novela histórica y espero me puedas dar tu opinión más adelante. Saludos
ResponderEliminarEres bienvenida y estaré encantado de aconsejarte en lo que necesites. Con seguridad eres una gran escritora. No te cohíbas tampoco por consejos o recomendaciones que podamos darte.
EliminarCreo que en este tema Hamilton (el musical aquel del que todos hablan) puede dar una gran lección a los escritores, tan simple como que ellos tomaron personajes históricos blancos pero los actores que los caracterizan son negros, latinos, minorías. Y bueno, tan fácil como eso, agarrar a un personaje que ya tengas construido y que en un principio imaginas blanco y re-imaginarlo como negro (es lo que yo hago todo el tiempo, también lo hago para convertir hombres en mujeres, lo uso pa'todo xD).
ResponderEliminarJa, ja, ja. Es riesgoso pero yo también lo he hecho. No faltan aquellos que se enojen y peleen por el cambio en el color de la piel. Las veces que esto sucede les explico que ese personaje corresponde al 0.01% de todos los personajes blancos de la literatura, por lo que no tiene por qué temer, quedan muchos personajes blancos intactos. Gato Kitsch, muchas gracias por pasarte y comentar
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